Parodia de un hecho real, la expropiación del holding RUMASA, propiedad del empresario José María Ruiz Mateos por el Gobierno presidido por Felipe González. La película narra las peripecias de tres amigos José María (Antonio Ozores), Ruiz (Juanito Navarro) y Mateo (Raúl Sender), que se dividen el accionariado de una empresa en grave crisis económica. Ante la adversidad, se dirigen al Gobierno de la Nación solicitando la expropiación de la compañía, de forma que no tengan que preocuparse de los sueldos de los trabajadores, ni de los suyos propios.